Debate sobre la gestión de nuestras ciudades y el arbolado urbano fue clave en el segundo café científico del año

La actividad, que se dio cita en la sala David Stitchkin, ubicada en el subsuelo de la Galería Universidad de Concepción, frente a la Plaza de la Independencia; tuvo una excelente concurrencia. Un público diverso que logró exponer sus dudas y posiciones frente al tema, amenizado por un café confortante y expertos que agilizaron la conversación.

Con una potente crítica a la gestión pública de los territorios y ciudades, comenzaron los expositores, el  Dr. Juan Pedro Elissetche, ingeniero forestal e investigador asociado del Centro de Biotecnología UdeC, desde la ONG Pronativo, Valentina Pino, arquitecta, paisajista y directora ejecutiva de la organización y Alejandra Soto Prado, ingeniera en biotecnología vegetal y encargada en gestión de proyectos y botánica. Quienes en alrededor de 40 minutos expusieron sobre las implicancias económicas, sociales y de salud de las especies vegetales en la ciudad y los errores sobre su  utilización y cuidado en nuestras urbes.

Para Valentina, quien junto a su compañera apostaron por la utilización de las especies nativas, “más allá de que el árbol sea o no nativo, esto entra en conflicto cuando el que se propone no es el correcto, ahí empieza el problema en el desarrollo de las ciudades: que se levantan las aceras, las podas costosas, los desganches de las ramas, etc.”

Y agrega, que “como no hay especialistas en las instituciones públicas, que definen el desarrollo urbano, es que tienen las mismas diez especies, como una forma de mobiliario, sin saber elegirlas en cuanto a sus raíces, modo de crecimiento y lugares a emplazar.”

Algo en lo que Juan Pedro también hizo hincapié, por lo que junto a la municipalidad comenzarían con catalogar los árboles de la comuna de Concepción, como una primera etapa de mejora en la gestión del entorno.

De esta manera las y los asistentes de la jornada también se acoplaron a las discusiones sobre la conservación de la flora autóctona, las controversias sobre el monocultivo forestal y la necesidad de una gestión sustentable de las ciudades.