Modesto Tamez: “La mejor parte de este centro son las personas, se toman muy en serio lo que hacen”
Modesto Tamez es Profesor Emérito del Museo Exploratorium de San Francisco, California, Estados Unidos, donde trabajó los últimos 25 años de su carrera profesional. El Museo Exploratorium es un espacio de ciencia, arte y percepción humana, sin duda, un referente para el Centro Interactivo de Ciencias Artes y Tecnologías, CiCAT y gracias a esta segunda visita de Tamez, pudimos aprender de la experiencia del Exploratorium.
Tamez fue bautizado por el Director como “El Padrino de la Fábrica de Ideas” por su gran aporte en la capacitación de los monitores que guían el trabajo a la nueva muestra interactiva y gracias a la experiencia del profesor en materias de experimentación y ciencia barata. Para Modesto la ciencia es algo cotidiano en su vida, pero al parecer, en CiCAT lo sorprendimos con la calidad humana de nuestro equipo. Con un español influenciado por el inglés, el científico mexicano radicado en Estados Unidos, conversó con cicatudec.com para compartir su admirable experiencia educativa.
Usted es experto en hacer ciencia barata ¿Cómo ha sido su vida de educador?
He tenido experiencias muy diferentes, trabajé durante 25 años en el Exploratorium, y antes trabajé 19 años como profesor de ciencias desde kínder hasta postgrados en la universidad. Fueron experiencias muy diferentes, en Exploratorium tuve un impacto muy grande porque ahí todo es interactivo, todo se aprende por hacer y es un imán para las personas que lo hacen. Yo fui una de las personas que estaba haciendo mucho en mis aulas esto de aprender haciendo experimentos en ciencia, entonces por eso a mi me ha tocado visitar muchos sitios del mundo, ya conozco 15 países y he tenido la oportunidad de estar 6 veces aquí en Chile, lo he recorrido de norte a sur y este es el único Centro interactivo de Chile que conozco.
¿Qué fue lo que más le gustó de CiCAT?
La mejor parte de este centro son las personas, son muy serias acerca de lo que hacen, muy trabajadoras y con mucha creatividad. Notan que hay líderes pero todos comparten juntos de una manera muy bonita. Aquí todos tienen interés en que la institución tenga éxito.
¿Cómo fue su experiencia en la Fábrica de Ideas?
Trabajé bastante en la Fábrica de Ideas y me impresionó mucho que especialmente los monitores tomaron gran responsabilidad y dirección. Lo que les enseñé en un principio fue "menos es más", de qué quiere decir esto, pero muy pronto vieron que es la manera de hacer las cosas. También noté con los monitores que hicieron el taller de robots que todos sus productos eran diferentes y los hicieron con pocas instrucciones y con los niños en la inauguración de la Fábrica obtuvieron buenos resultados.
¿Menos es más?
Estoy hablando de dar menos instrucciones, aunque a veces es necesario dar instrucciones muy específicas, pero cuando quiero proyectos de creatividad, se necesita tener instrucciones vagas o difusas, porque si das instrucciones muy específicas los productos van a ser todos iguales, pero si le enseñas sólo un ejemplo de una cosa, se está trabajando y ellos pueden hacer cualquier diseño. A los humanos les gusta crear cosas nuevas y hacer cosas diferentes.
¿Ha visto cosas nuevas aquí en CiCAT?
Para mi lo mas interesante es la forma de ser de los monitores, son muy serios en una manera que saben que son responsables de los niños, entonces son serios porque lo que están haciendo es muy importante. He visto miles de monitores y nunca he visto la independencia que tienen aquí. En un instante siguiendo mis instrucciones y en otro momento haciendo sus propias ideas y luego replicándolo con los niños.
Hoy la educación en Chile dista mucho de su ideal de enseñanza, ¿Qué consejo o crítica constructiva nos podría hacer?
Bueno, primero yo no voy a hacer ninguna crítica a Chile porque todo el mundo está igual, con todo lo que yo he visto, todos estamos en la misma situación de que hablamos mucho y no hacemos bastante. Lo que también he visto es que en todos lados están tratando de enseñar muchas cosas, te dan un libro de un grueso muy grande y los profesores tratan de terminar de la página 1 a la 500 y eso no es posible, entonces de crítica a Chile, nada. Lo que digo es que todos los profesores debemos enseñar menos contenidos pero con más profundidad.
¿Pero cómo se puede lograr eso cuando hay exigencias de un Ministerio de Educación?
Es así también en los Estados Unidos, también en Europa, también en Asia, lo que tienes que hacer es ser un poco rebelde, como yo era. Siempre me ponían un poco de problemas, pero yo prefiero pedir disculpas y no permiso, y como el producto era interesante mis directores no me sacaban del trabajo, ahora no puedo decir eso a todos porque hay posibilidad de que los despidan.
Yo creo que la cantidad no es lo importante si no hacen nada de experiencia, si viven experiencias tendrán mucho impacto. Yo no estoy diciendo que hagan una actividad todos los días, pero cuando puedan háganla, y éste es como el instrumento para hacer este tipo de enseñanza, tienen que practicar y tienen que practicar con cosas sencillas.
Al principio pueden hacer una actividad que no requiera mucho material y que tenga éxito con los alumnos y practiquen por un tiempo y luego hacen otra y después hacen otra y se van a tardar años. Ese es otro problema de los ministerios, que tienen muchos requisitos y quieren que los profesores cambien inmediatamente y quieren que cambie todo el mundo. Yo creo que cualquier proyecto que empieza y que le dicen que el 90 por ciento de la población tiene que aprender no es posible, pero yo digo que la educación tiene que cambiar pasito por pasito y siempre estar tratando de hacer más actividades prácticas para que los estudiantes aprendan haciendo.
En su experiencia, ¿Cuál fue la técnica para llegar al equilibrio entre lo que le exigían y lo que usted proponía como profesor?
Muchas cosas me enseñé con la lectura, con videos y todo pero también me junté con otros profesores con los que nos sentíamos de la misma manera en actividades y entonces compartimos nuestras ideas, eso es muy natural.
Es como lo que hicimos en el Exploratorium, que es como tener un club para profesores de secundaria, se juntaban por un período y les mostrábamos un sistema de enseñar y cada mes teníamos más talleres donde los invitábamos y así íbamos por más de 30 años. Dicen que Roma no se hizo en un día, se tarda tiempo.
En CiCAT trabajamos con niños, con adultos y es un espacio donde se da la oportunidad para que las personas puedan experimentar libremente. ¿Qué le parece todo esto?
Me encanta, para mi es lo natural y es precisamente lo que estoy tratando de enseñar, y lo que también me gusta es que trabajan con los niños y los padres.
Trabajar con la ciencia desde pequeños. Me gusta porque entre más pequeños es mejor, es como lo que pasa con la música, mientras más temprano empiezas a tocar el piano mejor. Mientras más temprano empiezas a trabajar con la ciencia interactiva mejor.
Muchos piensan que hacer ciencia interactiva es para los que quieren ser científicos, pero esto también se amplía a la vida en general…
Yo he notado por todo el mundo que en los cursos enseñan pensando en que los niños van a ser científicos y la verdad es que un 1 ó 2 por ciento de los niños van a ser científicos. Entonces para mí está todo al revés, la ciencia que deben estar enseñando es para usos relativos al mundo. Por qué el cielo es azul, por qué las fases de la luna, cosas con las que podamos tener experiencia diariamente, en ciencia cotidiana.
¿Actualmente está haciendo clases a los monjes del Dalai Lama?
Yo no soy muy religioso, pero voy más por el carácter de las personas. Para mí son adultos con el alma de un niño de 9 a 11, que para mí son los seres humanos más productivos y más interesantes, después de los 11 ya no estamos tan bien…jaja Ya llevamos como 6 años y creo que va a durar unos 4 años más. Los monjes y las monjitas aprenden y nunca se cansan. Nosotros hacemos trabajos de 8 a 10 horas por día, que es muy largo.
Los talleres que hacemos son de acuerdo a los intereses de ellos, que son de física, astronomía y percepción, somos como una docena de profesores de distintos países de Europa y de Asia los que vamos allá.
¿Cómo se financian estos talleres?
Con becas y aportes que vienen del gobierno, privados y lo que pagan es un sueldo pequeño y los viajes, que son muy caros. Por ejemplo los viajes de USA a la India son de casi 40 horas y cuestan mucho dinero. Y las personas que ayudan son personas que tienen mucho interés en ayudar al monasterio.
Ya lleva un año disfrutando de su jubilación, sin embargo continúa trabajando. ¿Cómo ha sido este tiempo?
Así es, llevo un año jubilado y en este tiempo enseñé aquí en CiCAT, en Turquía, en Austria, en Costa Rica dos veces, en Suiza, ese es mi pasatiempo, enseñar. También he caminado mucho porque vivo muy cerca del monte y he tomado lecciones de Jazz, que me está dando mucha información acerca de cómo se aprende porque ahora soy nuevo en aprender algo y me regresa a mi juventud cuando intentaba aprender algo.
Acabo de escribir un artículo para Austria traducido al alemán, que se llama un hombre volviéndose loco por la idea que nadie te ha enseñado nada nunca, y he comenzado otra cosa, tengo un proyecto con Costa Rica, donde quiero escribir un libro de ciencia barata, una persona que tienen un negocio que quizás me va a dar fondos para hacer el libro.
Al cerrar la entrevista el profesor nos contó que la muestra que más le gustó de CiCAT es la de "Biobío, Energía de Chile", porque en su opinión, los visitantes tienen mucho material para experimentar y comprender la energía de una manera práctica.
Modesto, dice que no es muy modesto, sin embargo hace honor a su nombre con la sencillez y la humildad que lo caracterizan. Además en su visita a CiCAT, demostró que es posible hacer una ciencia “modesta”, con experimentos de bajo presupuesto económico.